Solá se estrena como director con «Antes te gustaba la lluvia»

El texto de la escritora y dramaturga holandesa Lot Vekemans se interpretará en la Sala Dos del Teatro Fernán Gómez hasta el próximo 8 de abril, dirigido por Miguel Ángel Solá e interpretado por Blanca Oteyza y Sergio Otegui.

«Una mujer, un hombre, un encuentro fugaz tras diez años de ausencia. Un miedo masculino: el verse abrumado por emociones que escapan a su manejo. Una osadía femenina: bucear en el dolor hasta profundidades de las que ya es casi imposible emerger sin convertirse en animal de otro elemento». Este marco es el elegido por el prolífico actor argentino Miguel Ángel Solá para aventurarse en el mundo de la dirección a sus 62 años. Aunque como él mismo afirma, nunca ambicionó ser director. Sin embargo, se ha puesto manos a la obra para continuar ligado al teatro con «muchas ganas y la ilusión de empezar». Según los propios actores, Solá consigue darle dinamismo a ese humor ácido de la historia.

Durante la rueda de prensa del pasado 14 de marzo, Blanca Oteyza presentó la obra como una expresión de los sentimientos íntimos donde las relaciones humanas quedan al desnudo en un último intento de una mujer de arreglar aquello que se rompió hace tiempo. Una manera de «cerrar una asignatura pendiente» y de «hablar de aquello que no se pudo hablar en su  momento».

Por otro lado, tanto Oteyza como Otegui coincidieron en que la Sala Dos del Teatro Fernán Gómez es el entorno ideal para poder contar al público un drama como el que narra Antes te gustaba la lluvia. Una sala pequeña donde puedes llegar a intimar con los espectadores y donde la historia es reconocida de un modo u otro por los mismos. Un público que engloba diferentes generaciones y mientras unos, los mayores, se ven reflejados en las diferentes situaciones de la vida de los protagonistas, otros, los jóvenes, se sienten más identificados con la falta de comunicación y la ruptura de la pareja.

Aunque el título original fuese Tóxico, este se cambió para evitar el rechazo que pudiese generar ya que, como el mismo Sergio Otegui afirmó, «la obra cuenta cómo las personas se enfrentan de manera diferente a una desgracia y, por extensión, a la vida misma». Así, se trata de una obra que invita a reflexionar y a mirar con perspectiva las situaciones con las que uno se encuentra.